
Nadie queda en la tierra para presenciar
El acto de violencia que está ocurriendo;
El derroche de sangre pura e inocente,
Semi-inocente, por que la inocencia
aquí ya fue extirpada, hurtada y hecha muerta
El 24 de diciembre en el pabellón de fusilamiento,
Pero nadie estuvo allí para decir ¡yo se!
¡Yo vi! o "fue cierto" Solo mis ojos y mi carne.
Mis yo.
Semi-inocente por que los niños aun piensan
En que algún día dejaran de sacarle los ojos
Y las entrañas; los niños aun están dispuestos
a dar el salto de esperanza.
Pero los días. días que son noches, el amanecer
De otra noche tan oscura como la anterior
Por que aquí no hay sol. Están viniendo y se
Repite la escena psicópata. Llevada a cabo
por fantasmas que reviven de cada féretro
Mental, succionando la última munición de
Emociones y ganas. y nadie está en la tierra
para presenciar esta matanza macabra.
pronto las chispas de esperanza serán
Opacas y mi ciudad mental quedará
Tan vacía, muerta y alitraneada. Pero
Nadie queda en la tierra y yo no puedo
Decir nada.
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